Reza un viejo dicho que en la variedad está el placer, y es por esto mismo que muchas parejas buscan llevar a su intimidad nuevas experiencias que les permitan fortalecer su vida sexual.
Si bien los juguetes sexuales no son tan recientes -datan de hace más de dos mil años-, el hecho de incluirlos en la vida íntima sonroja a más de uno, sin pensar que podrían traer beneficios. Actualmente muchas parejas deciden utilizar estas herramientas eróticas para tener más fantasía y variar en su relaciones sexuales.
Pensar en utilizarlos o no es una decisión que sólo incumbe a las parejas. Los expertos afirman que la experimentación de los sex-toys marca la transición de la vida sexual y en ocasiones acaba la monotonía.

Contra el aburrimiento
¿A quién no le gusta jugar, reír y gozar al mismo tiempo, y más cuando es en la intimidad? Por estas razones muchas parejas deciden llevar a sus relaciones juguetes sexuales que les permitan experimentar.
Y es que esta es la finalidad de los sex-toys, lograr que quienes los utilizan potencien al máximo su imaginación, para ‘abandonarse’ al placer.
Para Rocío Guarín Serrano, ginecóloga, obstetra y sexóloga clínica, todo se basa en la buena comunicación de pareja, más “cuando comparten intereses mutuos”, de ahí encuentran el espacio para traer creatividad a la relación.
Los expertos aseguran que estos juguetes eróticos ayudan a combatir la monotonía, pero es importante separar los prejuicios o tabúes. “Cuando se llega al extremo se puede chocar con preceptos y deberían buscar orientación con una persona neutral con autoridad que les demuestre que eso no va en contra de sus convicciones y que no cometen actos pecaminosos”.

No debe ser un tabú
Para Hernán García Sarmiento, especialista en sicología clínica, existen registros históricos que muestran que los juguetes sexuales han existido y han sido usados desde hace miles de años con recato, pudor y prudencia.
El experto opina que todo esto ha cambiado debido a “la expansión de tiendas de estos artículos en el mercado que sensibilizan para que lo que era privado se convierta en algo público y junto con los cambios generados a partir de la globalización, haya mayores oportunidades de acercamiento a los objetos tabú de donde parte su desvanecimiento”.
Es así como, enfatiza García Sarmiento, el objetivo de utilizar juguetes sexuales en la intimidad, individual o de pareja, está determinado por el deseo, la fantasía y el erotismo de quien los utiliza.

“Los determinantes históricos individuales en la vida de una persona o pareja varían, y es por esta razón que en algunas edades la idea de los juguetes sexuales no llama la atención y prefieren no usarlos”,
Hernán García Sarmiento Especialista en Sicología clínica

Preguntas y respuestas

Rocío Guarín Serrano
Ginecóloga, Obstetra y Sexóloga Clínica
¿Cuál es la razón de utilizar juguetes sexuales en la intimidad?
Es un mecanismo de traer innovación a la relación sexual, creatividad, juego, y risa, porque se ha visto que las parejas que ríen y juegan en sus relaciones sexuales son mucho más duraderas. Esto hace que se liberen endorfinas, lo cual transmite una sensación de bienestar, tranquilidad y apego, y por eso se unen más a la pareja. Si sé que la otra persona me brinda tranquilidad, eso me genera más apego.

¿El uso de algunos juguetes sexuales tiene ventajas para la salud sexual?
Hay juguetes sexuales que tonifican el piso pélvico. También el uso de lubricantes, algunos con humectante, pueden también hacer que la mucosa vaginal se encuentre mejor tonificada y humectada, además de las ventajas sobre la psiquis, ya que algunos de estos juguetes liberan olores agradables y esto estimula los órganos de los sentidos haciendo un ambiente más tranquilo, erótico, afable, lo que contribuye a liberar estrés y que se sienta más relajado.

¿Cómo proponerle a la pareja utilizar estas herramientas eróticas?
Hay parejas que tienen una buena comunicación, que dialogan, comparten intereses mutuos, siempre encuentran un espacio para proponer a su pareja traer creatividad a la relación o a veces se pueden asesorar de un terapeuta sexual que de una manera neutral les puede proponer herramientas terapéuticas como los juegos sexuales para innovar.

En algunas ocasiones el uso de estos elementos puede ayudar a combatir la monotonía, la rutina y el aburrimiento sexual.

Hernán García Sarmiento
Especialista en Sicología clínica

¿Cuál es el objetivo de utilizar juguetes sexuales en la intimidad?
El Juguete sexual puede estar definido por la sociedad de consumo o por el sujeto. Si su uso se limita al propósito que trae la mercancía “juguete”, éste puede cumplir  inicialmente solo una función exploratoria o de curiosidad dentro de lo que  impone el fabricante. Así entonces puede resultar una moda usar juguetes y en consecuencia proliferan las tiendas que los venden; algunos los encontrarán divertidos y tal vez otros no. Lo importante es observar, más allá de la clase de juguete, el uso que se le da a éste. Ya la forma del juguete o las características físicas de él quedan resignificadas en  la historia de quien lo utiliza y puede entonces convertirse un “objeto de deseo” y quedar atado a una fantasía solitaria del sujeto, o en una fantasía individual dentro de la relación con su pareja o compartida con  ella.

¿Qué beneficios trae llevar a la intimidad los juguetes sexuales?
Si con el juguete aparece el juego erótico, es muy posible que enriquezca la capacidad de disfrutar. Pero también puede empobrecer la sexualidad. Cuando el juguete es condición sine qua non para el disfrute, entonces su uso se vuelve obligatorio; cuando el juguete se incrusta dentro de un rasgo sádico/masoquista y un miembro de la pareja no lo disfruta, el juguete elegido para dicho fin resulta amenazante por displacentero.

¿Se puede pensar que su uso es una forma de sustituir a la pareja?
Quien utiliza un juguete de manera individual, no por ello va camino a la sustitución o reemplazo de alguien. El autoerotismo con uso de juguetes es una elección, que si se convierte en una práctica exclusiva, se constituye en una perversión, una desviación del objeto para alcanzar la descarga. Esto no puede atribuirse al uso de un juguete sexual sino a una condición individual del sujeto, que se comprende y explica al interior de su propia historia.

“Una pareja estable debe tener de base una buena comunicación”.
Rocío Guarín Serrano, Ginecóloga, Obstetra y Sexóloga Clínica